martes, 17 de enero de 2012

La forja en la Sierra del Albarracín. (II)


La Forja en la Sierra de Albarracín, Teruel.


   La sierra de Albarracín  abarca todo un gran territorio cuyo paisaje natural, apenas alterado, lo componen grandes zonas de pinares, sabinas y carrascas,  donde la arenisca del rodeno, las cristalinas y frías aguas de nacimientos y barrancos, circulan alegres entre depresiones y estrechos senderos, que unen como antaño los diferentes enclaves poblados de toda la comarca. En estos pueblos se vislumbra, pese al paso del tiempo, una arquitectura cuyo fin último, dentro de su sencillez y sobrio carácter, es la salvaguarda de hombres y animales. Alejada de grandes aspavientos, los efectos plásticos de esta sabia forma de construir han ido forjando lo que podemos percibir como una amalgama de piedra, hierro, madera , yeso y arcilla, provocando una mimesis única  entre los paisajes natural y humano, es decir, lo que ha sido, es y será la Sierra de Albarracín.